
Lección 27: No hay vuelta atrás
Cuando una paracaidista se acerca al borde de la puerta del avión y salta, sabe que no hay vuelta atrás. Ha ido demasiado lejos, y si olvida ponerse el paracaídas, nada podrá salvarla y sin duda caerá en picado hacia una muerte aterradora. ¡Qué tragedia! Pero hay algo aún peor que le puede pasar a una persona. De hecho, es mucho peor llegar a un punto sin retorno en su relación con Dios. ¡Sin embargo, millones se están acercando a este punto y no tienen ni idea! ¿Será posible que usted sea uno de ellos? ¿Cuál es el terrible pecado que podría llevar a tal destino? ¿Por qué Dios no puede perdonarlo? Para una respuesta clara y penetrante, que además está llena de esperanza, tómese unos minutos con esta fascinante Guía de Estudio.

1. ¿Cuál es el pecado que Dios no puede perdonar?
"...Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada" (Mateo 12:31).
Respuesta: El pecado que Dios no puede perdonar es la "blasfemia contra el Espíritu Santo". Pero, ¿qué es la "blasfemia contra el Espíritu Santo"? ¡La gente tiene muchas opiniones diferentes sobre este pecado. Algunos creen que es el asesinato; otros, maldecir al Espíritu Santo; para algunos, el suicidio; algunos creen que el aborto; otros, el negar a Cristo; otros, un acto atroz, horrible, extremadamente malévolo; y para otros, la adoración de un dios falso! La próxima pregunta arrojará algo de claridad sobre este asunto tan importante.
2. ¿Qué dice la Biblia con respecto al pecado y la blasfemia?
"... Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres..." (Mateo 12:31).
Respuesta: La Biblia claramente dice que todo pecado y blasfemia será perdonado. Así que ninguno de los pecados mencionados anteriormente es el pecado que Dios no puede perdonar. Ningún acto singular de ninguna clase es el pecado imperdonable.
Parece Contradictorio
Sí, parece contradictorio pero ambas declaraciones a continuación son verdaderas:
A. Cualquier y todo tipo de pecado y blasfemia será perdonado.
B. La blasfemia o pecado contra el Espíritu Santo no será perdonado.
Jesús hizo ambas declaraciones
Jesús hizo ambas declaraciones en Mateo 12:31, así que no hay ningún error aquí.


3. ¿Cuál es la obra del Espíritu Santo?
"... Convencerá [el Espíritu Santo] al mundo de pecado, de justicia y de juicio." "... El os guiará a toda la verdad" (Juan 16:8, 13).
Respuesta: La obra del Espíritu Santo es convencerme de pecado y guiarme a toda verdad. El Espíritu Santo es la agencia de Dios para la conversión. Sin el toque del Espíritu Santo, nadie siente dolor por el pecado, y nadie se convertiría.
4. Cuando el Espíritu Santo me convence de pecado, ¿qué debo de hacer para ser perdonado?
"Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad" (1 Juan 1:9).
Respuesta: Cuando soy convencido de pecado por el Espíritu Santo, debo confesar mis pecados para ser perdonado. Cuando los confieso, Dios no sólo me perdona, sino que también milagrosamente me limpia de toda maldad. Dios está a la espera, y listo para perdonarme por cualquier pecado que pueda cometer (Salmos 86:5), aunque solamente lo hará si yo lo confieso y me aparto.


5. ¿Qué sucede si no confieso mis pecados cuando
soy convencido por el Espíritu Santo?
"El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y se aparta alcanzará
misericordia" (Proverbios 28:13).
Respuesta: Si no confieso mis pecados, Jesús no me puede perdonar. De allí que cualquier pecado
que yo no confiese es imperdonable hasta que lo confieso. El perdón siempre sigue a la confesión,
nunca llega antes.
Terrible Peligro el Resistir al Espíritu Santo
Resistir al Espíritu Santo es terriblemente peligroso porque fácilmente lleva al rechazo del Espíritu Santo este es el pecado que Dios nunca puede perdonar. Es ir más allá el punto de no retorno. Si permanentemente rechazo al Espíritu Santo mi caso está sin esperanza, debido a que es el único agente que lleva al convencimiento del mal. Este tema es tan importante que Dios lo ilustra y explica en varias formas en las Escrituras. Observe estas diferentes explicaciones mientras continúa explorando esta Guía de Estudio.
6. Si el Espíritu Santo me convence de pecado o me guía a una nueva verdad, ¿Cuándo debo actuar?
Respuesta: La Biblia dice:
A. "Al oír de mí me obedecieron..." (Salmos 18:44).
B. "Me apresuré y no me retardé en guardar tus mandamientos" (Salmos 119:60).
C. "... He aquí ahora el tiempo aceptable he aquí ahora el día de Salvación" (2 Corintios 6:2).
D. "Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre" (Hechos 22:16).
La Biblia repetidas veces declara que cuando soy convencido de pecado, tengo que confesarlo inmediatamente. Y cuando aprendo una nueva verdad, tengo que aceptarla sin demora.


7. ¿Qué aviso solemne da Dios con respecto a la
súplica del Espíritu Santo?
"Y dijo Jehová: No contenderá mi Espíritu con el hombre para siempre..." (Génesis 6:3).
Respuesta: Dios solemnemente advierte que el Espíritu Santo no continuará suplicándole
indefinidamente a una persona que se vuelva del pecado y obedezca a Dios.
8. ¿En qué punto deja el Espíritu Santo de suplicarle a una persona?
"Por eso les hablo por parábolas, porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden" (Mateo 13:13).
Respuesta: El Espíritu Santo deja de hablarle a la persona cuando el individuo se vuelve sordo a su voz. La Biblia lo describe como oír sin escuchar. No tiene sentido que
un sordo ponga la alarma en un reloj despertador. No la escuchará. De igual manera una persona puede condicionarse a no escuchar el sonido de una alarma al apagarla repetidas veces y no levantarse. El día finalmente llega cuando no la escuchará.
No Apague al Espíritu Santo
Lo mismo sucede con el Espíritu Santo. Si continúo apagándolo, un día me hablará y no lo escucharé. Cuando llegue ese día, el Espíritu con tristeza me abandonará porque me he vuelto sordo a Sus súplicas. Habré pasado el punto de no retorno. ¡Qué aviso solemne e inquietante es el resistir la voz del Espíritu!


9. Dios, por medio de Su Espíritu Santo trae luz (Juan 1:9), y convicción (Juan 16:8), a toda persona sobre la tierra. ¿Qué debo hacer cuando recibo luz del Espíritu Santo?
"La senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto. El
camino de los impíos es como la oscuridad..." (Proverbios 4:18,19). "...Andad entre tanto que tenéis luz,
para que no os sorprendan las tinieblas..." (Juan 12:35).
Respuesta: La regla bíblica es que cuando el Espíritu Santo me trae nueva luz o convicción de pecado, debo actuar inmediatamente, obedecer sin tardanza. Si al recibir la luz obedezco y camino en ella, Dios continuará dándome luz. Si la rechazo, aún la luz que tengo se apagará, y seré dejado en la oscuridad. La oscuridad que llega como resultado de rechazar al Espíritu en forma persistente y terminante, y de no seguir la luz, me dejará sin ninguna esperanza.
10. ¿Puede cualquier pecado convertirse en pecado contra el Espíritu Santo?
Respuesta: Ciertamente. Si de manera constante rehúso confesar y dejar cualquier pecado, me volveré sordo a las súplicas del Espíritu Santo y con ello pasaré el punto de no retorno. A continuación hay algunos ejemplos bíblicos.
A. El pecado imperdonable de Judas fue la codicia (Juan 12:6). ¿Por qué? ¿Fue acaso porque Dios no lo podía perdonar? ¡No! Se volvió imperdonable solamente porque Judas rehusó escuchar al Espíritu Santo y confesar su pecado de codicia. Eventualmente se volvió sordo a la voz del Espíritu.
B. Los pecados imperdonables de Lucifer fueron el orgullo y la exaltación propia (Isaías 14:12-14.) Dios puede perdonar estos pecados. Lucifer pudo haber sido perdonado y limpiado, pero rehusó escuchar hasta que ya no pudo escuchar la voz del Espíritu.
C. El pecado imperdonable de los Fariseos fue el rechazo de aceptar a Jesús como el Mesías (Marcos 3:22-30). Fueron persuadidos en repetidas ocasiones, con una profunda convicción, que Jesús era el Mesías, el Hijo del Dios viviente del cielo. Pero endurecieron el corazón y tercamente rechazaron aceptarlo como Salvador y Señor. Finalmente se volvieron sordos a la voz del Espíritu. Hasta que un día, después de presenciar otro gran milagro de Jesús, los Fariseos declararon ante la multitud que Jesús recibía su poder del Diablo. Cristo inmediatamente les dijo que el atribuir su poder milagroso al Diablo indicaba que habían pasado el punto de no retorno y habían blasfemado al Espíritu Santo. Dios podía, y con gusto los habría perdonado. Pero rehusaron escuchar al Espíritu Santo hasta que estuvieron sordos como una piedra, y ya no pudieron ser alcanzados.
Yo No Puedo Escoger Las Consecuencias
Cuando el Espíritu hace su llamado, puedo escoger responder o rechazar, pero no puedo escoger las consecuencias. Ellas son inmutables. Si consistentemente respondo, llegaré a ser como Jesús. El Espíritu Santo me sellará o pondrá su marca sobre mi frente mostrando que soy un hijo de Dios (Apocalipsis 7:2,3), y eso me asegura un lugar en el reino celestial. Si persistentemente escojo rechazar su voz, ahuyentaré al Espíritu Santo y me dejará para siempre, asegurando mi perdición. ¡Qué solemne aviso para no ignorar la voz del Espíritu Santo!

11. Después que el Rey David cometió un terrible doble
pecado de adulterio y asesinato, ¿qué angustiosa oración
elevó?
"...No quites de mí tu Santo Espíritu" (Salmos 51:11).
Respuesta: Le suplicó a Dios que no le quitara el Espíritu Santo. ¿Por qué? Porque David sabía que si el
Espíritu Santo lo dejaba, estaría condenado desde ese momento. Sabía que únicamente el Espíritu lo podría
guiar al arrepentimiento y a la restauración, y tembló al pensar que corría el peligro de no poder escuchar
Su voz. La Biblia nos dice en otro pasaje que Dios finalmente dejó a Efraín solo porque se había dado a la
adoración de ídolos (Oseas 4:17), y no quería escuchar al Espíritu. Se había vuelto espiritualmente sordo.
Lo más trágico que le pueda ocurrir a cualquier persona es que Dios tenga que decidir dejarlo solo. ¡No
permita que eso le suceda a usted!


12. ¿Qué serio y profundo mandato le dio Pablo a la iglesia de Tesalónica?
"No apaguéis al Espíritu" (1 Tesalonicenses 5:19).
Respuesta: La súplica del Espíritu Santo es como un fuego que arde en la mente y el corazón de la persona. El pecado tiene el mismo efecto en el Espíritu Santo que el agua tiene sobre el fuego. Cuando rechazo al Espíritu Santo y permanezco en pecado, es como si echara agua en el fuego del Espíritu Santo. Las tremendas palabras de Pablo a los Tesalonicenses también se aplican a nosotros hoy. No apague el fuego del Espíritu Santo rehusando de manera repetitiva obedecer la voz del Espíritu. Si el fuego se apaga, habré cruzado el punto de no retorno.
Cualquier Pecado Puede Apagar el Fuego
Cualquier pecado que no confesamos, o no abandonamos, puede finalmente apagar el fuego del Espíritu Santo. Puede ser el rechazo de guardar el Sábado como día santo del Señor. Puede ser el uso del tabaco. Puede ser el no perdonar a alguien que te ha traicionado o lastimado. Puede ser problemas de inmoralidad. Puede ser el quedarse con el diezmo de Dios. Si rechazamos obedecer la voz del Espíritu Santo en cualquier área, equivale a echar agua sobre ese fuego. No apague el fuego. No puede haber una mayor tragedia.
13. ¿Qué declaración alarmante, casi inconcebible, hizo Pablo a los creyentes de Tesalónica?
"Y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira. A fin de que sean condenados [se pierdan] todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia" (2 Tesalonicenses 2:10-12).
Respuesta: ¡Qué palabras alarmantes y poderosas! Dios dice que aquellos que rehúsen recibir la verdad y la convicción que trae el Espíritu Santo, recibirán una falsa impresión después que el Espíritu Santo los deje, para creer que el error es la verdad. ¡Es un sombrío pensamiento!


14. ¿Qué terrible experiencia tendrán en el día del juicio algunos a quienes se les han enviado estos poderosos engaños?
"Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos
fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí;
apartaos de mí, hacedores de maldad" (Mateo 7:22, 23).
Respuesta: Los que estén clamando, "Señor, Señor" estarán sorprendidos y alarmados que fueron dejados fuera. Estarán absolutamente convencidos que estaban salvos. Jesús entonces, sin duda les recordará acerca de ese tiempo crucial en sus vidas cuando el Espíritu Santo les trajo nueva verdad y convicción. Estaba todo tan claro como el cristal y era una verdad obvia. Los mantuvo despiertos por las noches, los preocupados y luchando con la decisión final. ¡Cómo su corazón ardía dentro de ellos! Finalmente, dijeron, "¡No!" Y rehusaron seguir escuchando al Espíritu Santo. Después vino el gran engaño que les hizo sentirse salvos, cuando en realidad estaban perdidos. ¿Puede un ser humano enfrentarse con una tragedia mayor que ésta?
15. ¿Qué palabras especiales de advertencia nos presenta Jesús para ayudarnos a no caer en el error de creer que somos salvos, cuando realmente estamos perdidos?
"No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos" (Mateo 7:21).
Respuesta: Jesús solemnemente nos advierte que no todo el que se siente salvo entrará en su reino sino, únicamente aquellos que hacen su voluntad. Todos nosotros deseamos tener la seguridad de la salvación. Es un imperativo divino. Sin embargo, hoy hay una falsa oferta de seguridad que contagia a la cristiandad. La misma promete a la gente salvación aun cuando continúe viviendo en pecado y no manifieste ningún cambio en su forma de vida.
Pastores Alarmados
Más y más líderes prominentes de la iglesia están alarmados porque muchos templos están llenos de personas que tienen un cierto sentimiento de "seguridad" pero que realmente no han sido transformados por Jesucristo. Ni tampoco lo obedecen.
Jesús Limpia el Aire
Jesús dice que la única y verdadera seguridad que existe es la que tienen aquellos que hacen la voluntad de su Padre. Cuando acepto a Jesús como Señor y Amo de mi vida, mi forma de vida cambiará radicalmente. Me convertiré completamente en una nueva persona (2 Corintios 5:17). Con gusto guardaré sus mandamientos, haré su voluntad (Juan 14:15), y con gozo seguiré a donde él me guíe (1 Pedro 2:21). Su poder fantástico de resurrección (Filipenses 3:10) me transforma a su imagen (2 Corintios 3:18). Su gloriosa paz inunda mi vida (Juan 14:27). Con Jesús morando en mi vida, por medio de su Espíritu (Efesios 3:16, 17), "Todo lo puedo..." (Filipenses 4:13) y "nada os será imposible" (Mateo 17:20).
Fabulosa Verdadera Seguridad Versus Falsa Seguridad
Cuando voy donde el Salvador me guía, él me promete que nadie me puede sacar de su mano (Juan 10:28), y que la corona de vida me espera (Apocalipsis 2:10). ¡Qué seguridad genuina, increíble, gloriosa que Jesús le da a sus seguidores! Otra seguridad que se nos prometa bajo cualquier condición es falsa. Llevará a la gente a afrontar el juicio celestial, sintiéndose segura porque está salvada cuando está realmente perdida (Proverbios 16:25).


16. ¿Cuál es la bendita promesa que Dios hace
a sus fieles seguidores, aquellos que lo coronan
como Señor de sus vidas?
"... El que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo".
"Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena
voluntad" (Filipenses 1:6; 2:13).
Respuesta: ¡Alabado sea el Señor! A aquellos que hacen a Jesús el Señor y Amo de sus vidas se les prometen los milagros de Jesús que los llevarán con seguridad a su eterno reino. ¡Nada puede ser mejor que eso!
17. ¿Qué gloriosa promesa adicional nos hace Jesús a todos nosotros?
"He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo" (Apocalipsis 3:20).
Respuesta: Jesús promete entrar a nuestras vidas cuando le abramos la puerta. Es Jesús el que llama a la puerta de tu corazón y del mío, por medio de su Espíritu Santo. Jesús el Rey de Reyes, el Salvador del mundo, saca tiempo de sus obligaciones como gobernante del universo para visitarnos regularmente en
una forma amante y amistosa, cuidándonos y aconsejándonos. ¡Qué ignorancia, qué increíble calamidad, que siempre estamos demasiado ocupados o muy desinteresados para establecer una calurosa, amante y perdurable amistad con Jesús! Los que son amigos cercanos de Jesús no correrán el peligro de ser rechazados en el día del juicio. Jesús les dará la bienvenida personalmente a su reino (Mateo 25:34).


18. Ahora he decidido abrir siempre la puerta cada vez que Jesús llame a mi corazón así también, estaré dispuesto a seguirlo a donde él me guíe.
Una Palabra de Despedida
Esta es la última Guía de Estudio de una serie de 27. Nuestro amante deseo es que usted haya sido guiado a la presencia de Jesús y haya experimentado una relación fantástica con él. Esperamos que usted camine más cerca del Maestro cada día y que pronto se una con el grupo gozoso que será trasladado a su reino bendito cuando él se manifieste. Si no nos encontramos en esta tierra, hagamos el trato de encontrarnos en las nubes en ese gran día.
Por favor, llámenos o escriba si cree que podemos ayudarlo en algo en su jornada hacia el hogar celestial.
Respuesta: __________________________________________________________________________________
Preguntas para reflexionar
1. La Biblia dice que Dios endureció el corazón del faraón (Éxodo 9:12). Eso no parece justo. ¿Qué significa?
El Espíritu Santo intercede por todas las personas, así como el sol brilla sobre todos y sobre todo (Juan 1:9). El mismo sol que endurece la arcilla también derrite la cera. El Espíritu Santo tiene un efecto diferente en nuestros corazones según cómo nos relacionemos con sus súplicas. Si respondemos, nuestro corazón se ablandará y cambiaremos por completo (1 Samuel 10:6). Si nos resistimos, nuestro corazón se endurecerá (Zacarías 7:12).
Respuesta del faraón
Faraón, de hecho, endureció su propio corazón al resistirse al Espíritu Santo (Éxodo 8:15, 32; 9:34). Pero la Biblia también habla de que Dios endureció su corazón porque el Espíritu Santo de Dios siguió intercediendo por él. Como Faraón seguía resistiéndose, su corazón se endureció como el sol endurece la arcilla. Si Faraón hubiera escuchado, su corazón se habría ablandado como el sol ablanda la cera.
Judas y Pedro
Los discípulos de Cristo, Judas y Pedro, demostraron este mismo principio. Ambos habían pecado gravemente. Uno traicionó y el otro negó a Jesús. ¿Cuál es peor? ¿Quién sabe? El mismo Espíritu Santo les suplicó a ambos. Judas se armó de valor y su corazón se volvió como una piedra. Pedro, en cambio, fue receptivo al Espíritu y su corazón se derritió. Se arrepintió sinceramente y más tarde se convirtió en uno de los grandes predicadores de la iglesia primitiva. Lea Zacarías 7:12, 13, para la seria advertencia de Dios sobre endurecer nuestros corazones para no escuchar y obedecer las súplicas de su Espíritu.
2. ¿Es seguro pedir señales al Señor antes de elegir la obediencia?
¿Es seguro pedir señales al Señor antes de elegir la obediencia? En el Nuevo Testamento, Jesús se pronunció en contra de pedir señales, diciendo: «Una generación malvada y adúltera demanda señal» (Mateo 12:39). Enseñaba la verdad y la respaldaba con el Antiguo Testamento, que eran las Escrituras disponibles en ese entonces. Entendían perfectamente lo que decía. También vieron sus milagros, pero aun así lo rechazaron. Más tarde dijo: «Si no escuchan a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se levante de entre los muertos» (Lucas 16:31). La Biblia nos dice que lo examinemos todo con las Escrituras (Isaías 8:19, 20). Si nos comprometemos a hacer la voluntad de Jesús y a seguir su guía, Él promete que nos ayudará a discernir la verdad del error (Juan 7:17).
3. ¿Hay alguna ocasión en que la oración no sea útil?
Sí. Si una persona desobedece a Dios a sabiendas (Salmo 66:18) y, sin embargo, le pide a Dios que la bendiga aunque no piensa cambiar, su oración no solo es inútil, sino que Dios la considera una abominación (Proverbios 28:9).
4. Me preocupa haber rechazado al Espíritu Santo y no poder ser perdonado. ¿Puedes ayudarme?
No has rechazado al Espíritu Santo. Puedes saberlo porque te sientes preocupado o convencido. Es solo el Espíritu Santo quien te trae preocupación y convicción (Juan 16:8-13). Si el Espíritu Santo te hubiera abandonado, no habría preocupación ni convicción en tu corazón. ¡Regocíjate y alaba a Dios! ¡Entrégale tu vida ahora! Y síguelo y obedécelo con oración en los días venideros. Él te dará la victoria (1 Corintios 15:57), te sostendrá (Filipenses 2:13) y te guardará hasta su regreso (Filipenses 1:6).
5. En la parábola del sembrador (Lucas 8:5-15), ¿qué significa la semilla que cayó junto al camino y fue comida por las aves?
La Biblia dice: «La semilla es la palabra de Dios. Los que están junto al camino son los que oyen; luego viene el diablo y arrebata la palabra de su corazón, para que no crean y se salven» (Lucas 8:11, 12). Jesús estaba señalando que cuando entendemos lo que el Espíritu Santo nos pide hacer con respecto a la nueva luz de las Escrituras, debemos actuar conforme a ello. De lo contrario, el diablo tiene la oportunidad de eliminar esa verdad de nuestras mentes.
6. ¿Cómo puede el Señor decir «nunca os conocí» a las personas a las que se dirigía en Mateo 7:21-23? ¡Creía que Dios conocía a todos y todo!
Dios se refiere aquí a conocer a alguien como un amigo personal. Lo conocemos como amigo cuando nos comunicamos con Él diariamente a través de la oración y el estudio bíblico, lo seguimos y compartimos libremente con Él nuestras alegrías y tristezas como con un amigo terrenal. Jesús dijo: «Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando» (Juan 15:14). Las personas a las que se dirige Mateo capítulo 7 habrán rechazado su Espíritu Santo. Habrán aceptado la salvación en el pecado o la salvación por obras, ninguna de las cuales necesita a Jesús. Son personas que se han hecho a sí mismas y no se toman el tiempo para conocer al Salvador. Por lo tanto, Él explicó que no habrá podido conocerlos realmente como sus amigos personales.
7. ¿Puede explicar Efesios 4:30?
El versículo dice: «No contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención». Pablo aquí implica que el Espíritu Santo es un ser personal, porque solo las personas pueden ser contristadas. Aún más importante, afirma que el Espíritu Santo de Cristo puede ser contristado por mi rechazo a sus amorosas súplicas. Así como un noviazgo puede terminar para siempre por la negativa reiterada de una de las partes a las tentaciones de la otra, nuestra relación con el Espíritu Santo puede terminar permanentemente por nuestra persistente negativa a responder a sus amorosas súplicas.